- El Aove y el olivar
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En artículos anteriores de Oliva del Sur ya vimos algunas de las previsiones sobre la producción de aceite de oliva que se esperaban para la cosecha de este año. Sabíamos que habría menos producción y que el aceite de oliva sería también más caro.
Máximo histórico en el precio del aceite de oliva
Pues bien, el inicio de la campaña de recogida de la aceituna ya está haciendo de estas previsiones una realidad. Incluso, se espera que este año la producción de aceite de oliva sea "aún peor" de lo previsto, según la organización agraria COAG de Jaén.
Algo que ya se está traduciendo en los precios del aceite de oliva, que acaban de marcar máximos históricos en origen, al superar los cinco euros.
Un máximo histórico que no parece que se vaya a quedar ahí, ya que, aunque el grueso de las operaciones en virgen extra se están cerrando en el entorno de los 5,1 euros, casi un 15 por ciento de las mismas se producen rozando los seis euros.
En los lineales de los supermercados el litro de aceite de oliva se paga alrededor de un cincuenta por ciento más cara que a principios de año.
¿Por qué no para de subir el precio del aceite de oliva?
La producción de aceituna se ha visto mermada por las escasas lluvias, mientras que la demanda se ha mantenido.
Es decir, a pesar de la fuerte subida de precios los consumidores siguen fieles al aceite de oliva. No olvidemos que es uno de los productos base de la dieta mediterránea.
A la falta de lluvias habría que sumar los costes de producción, que están siendo los más altos de la historia (en el último año se ha producido la mayor subida en tres décadas).
Estas dos condiciones estarían detrás de esta brutal subida en el precio de la cesta de la compra, con el aceite de oliva como uno de los productos que más se ha encarecido.
Dos condicionantes que ya están pasando al precio del aceite de oliva en origen, que como comentábamos, han alcanzado su máximo histórico, superando los 5 euros por kilo en las almazaras. Unas cotas nunca vistas.
¿Cómo será la campaña de aceituna?
En Jaén, una de las provincias españolas donde la producción de aceite de oliva es especialmente notoria, los datos "ponen en duda" que este año se llegue a superar a la peor cosecha de este siglo, que se registró en la campaña 2012-2013: se recogieron 142.849 toneladas de aceite.
En el caso de Castilla-La Mancha, la segunda comunidad autónoma en elaboración de aceite de oliva, la cosecha de aceite de oliva para este año será "relativamente corta", ya que se prevé una recogida de 85.000 toneladas.
Esta cifra sería la mitad que contabilizó la región en sus años récord y unas 40.000 toneladas inferior a la media de los últimos años, cifraba el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.
Unas cifras preocupantes que no podremos confirmar hasta que dé por finalizada la campaña de recogida.