Cómo saber si el aceite de oliva es de buena calidad

Hoy en Oliva de Sur queremos ayudarte a diferenciar los aceites de oliva de gran calidad de los low cost o de calidad inferior.

Ya no tendrás dudas a la hora de hacer tu compra ¡Toma nota de todo!

Cómo saber si un aceite de oliva es bueno

1) Fíjate en que no esté mal etiquetado: Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de escoger un aceite de oliva de calidad es leer la etiqueta del producto. Un paso básico, pero muy importante para comprobar las características de este.

Si quieres consumir un buen aceite de oliva debes asegurarte de que en su etiqueta venga señalizado como aceite de oliva Virgen Extra, que es el de mayor calidad. 

2) Su forma de elaboración: La manera en la que se ha elaborado el aceite es importante.

Debemos buscar siempre en la etiqueta la catalogación de “primera extracción en frío”, evitando así los productos catalogados como “prensados”. Esto se debe a que las máquinas tradicionales de prensado pueden producir oxidación en el aceite, mientras que las máquinas modernas de acero inoxidable evitan que esto suceda. De ahí que el aceite de oliva de primera extracción en frío sea un aceite de primerísima calidad.

3) Picor en la garganta: Seguramente ya hayas podido comprobar ese picor que se produce en la garganta cuando consumes aceite de oliva en seco. Bien, esto es una señal de que ese aceite que estás consumiendo es un producto de calidad. ¡Te explicamos la razón!

Este picor en la garganta, que nos puede hacer incluso toser, proviene de los polifenoles, unos antioxidantes naturales que proceden de la propia aceituna. Estos se pierden con el proceso de refinado al que son sometidos los aceites de oliva de baja calidad y, por esta razón, no se aprecia en ellos esta sensación de picor.

Cómo saber si el aceite de oliva es de buena calidad 

Sigamos viendo otros parámetros influyentes en la calidad del aceite de oliva: 

6) La fecha de envasado:Siempre es más recomendable adquirir aceites cuya fecha de envasado haya sido muy reciente. Es decir, que ese aceite de oliva haya sido producido lo más cerca posible de la fecha en la que lo estamos comprando en el supermercado.

7) El tipo de envase: El aceite de oliva y el vino tienen los mismos enemigos naturales: el aire, la luz y las altas temperaturas. Por ello, debes evitar conservarlos en envases transparentes.

Lo correcto es conservar el aceite de oliva en botellas oscuras o dentro de estuches que lo protejan de la luz, ya que se trata de un producto muy sensible a esta y a la oxigenación. Estar expuesto a estos factores le hará perder gran parte de su calidad. ¡Fíjate muy bien en como está expuesto y envasado en el supermercado! 

8) Ten en cuenta su sabor: Cuando los especialistas en la cata de aceites determinan su calidad, los aromas del producto son un factor determinante. En primer lugar, deberás percibir el amargor (sabor básico característico del aceite obtenido de aceitunas verdes) y la acidez del aceite de oliva (cerca del 0’1). Cuanto mayor sea esta acidez, peor será la calidad.

Cómo saber si el aceite de oliva es de buena calidad

Como siempre, resumiremos a continuación las ideas más importantes que hemos visto en el post de hoy, para que todo quede mucho más claro:

 1) Comprueba en la etiqueta que el producto presente las siguientes características: que su elaboración sea de primera extracción en frío, que se haya envasado en una fecha reciente y que el envasado ni sea transparente ni esté expuesto a la luz o a altas temperaturas.

2) Debes buscar siempre un Aceite de oliva Virgen Extra.

3) Es una cualidad positiva que un aceite de oliva pique en la garganta.

4) Los aromas del aceite de oliva serán determinantes: su amargor y que no sea excesivamente ácido.

¡Esto ha sido todo! Esperamos que todo haya quedado bien claro y, por supuesto, que tengas en cuenta todos estos parámetros a la hora de comprar aceite de oliva.